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Aplicación didáctica

La utilización de IaaS en el ámbito académico proporciona dos ventajas principalmente: agilidad a la hora de crear un entorno de trabajo y que la secuencia de aprendizaje no venga condicionada por una configuración previa.

Agilidad

El proceso mediante el cual un alumno dispone de un entorno de trabajo completamente funcional es muy sencillo y apenas supone unos minutos. Este entorno de trabajo es totalmente independiente del equipo en el que trabaja el alumno, por lo que no es necesario apenas tener conocimientos previos para poder utilizarlo y no depende ni del software ni del hardware que tenga dicho equipo.

En este tipo de entornos es muy sencillo eliminar las instancias que hubiera configuradas previamente y volver a tener un escenario limpio a partir de imágenes o instantáneas que el propio alumno vaya realizando.

Secuencia de aprendizaje

Un problema que habitualmente nos encontramos en el aprendizaje práctico de cualquier nueva tecnología es que es imprescindible contar con un escenario configurado que nos permita empezar el proceso de aprendizaje. Habitualmente es el alumno quien configura ese escenario en su propio equipo, bien directamente sobre el sistema que tenga instalado, bien sobre una máquina virtual, pero esto supone en muchas ocasiones un importante problema ya que el alumno carece en ese momento de los conocimientos o habilidades precisas para realizar esta configuración adecuadamente.

Desde un punto de vista meramente pedagógico, sería mucho más conveniente poder empezar a utilizar un software antes de tener que instalarlo y configurarlo. La utilización de IaaS nos permite acercarnos más a este enfoque ya que permite la creación previa de una imagen con toda la configuración necesaria por parte del profesor y el alumno se limita a utilizarla dentro de su propio entorno sin interferir con sus compañeros.

Otras ventajas

Ejemplos

Veamos algunos ejemplos en los que la agilidad y una secuencia de aprendizaje más adecuada se ven beneficiados por la utilización de instancias de máquinas virtuales en un entorno de IaaS.

Instalación de un servidor de bases de datos

Supongamos que durante los primeros días de clase queremos que cada alumno disponga de un servidor de bases de datos correctamente configurado para su utilización.

Esto no implica que el alumno no tenga que realizar la instalación y configuración de un servidor de bases de datos, sino que esta práctica se realizará cuando se estime más oportuno y no vendrá condicionada por necesidades previas.

Configuración de redes virtuales

La configuración de los gestores de máquinas virtuales y en particular las redes virtuales en equipos de alumnos de primer curso suele provocar bastantes problemas ya que no tienen los conocimientos previos para hacerlo adecuadamente: Es complicado que 30 personas configuren adecuadamente las redes en modo NAT o bridge cuando aún no tienen ni idea de lo que es una cosa u otra.

Obviamente esto no significa ni mucho menos que la utilización de máquinas virtuales no deba ser importante en el aprendizaje de nuestros alumnos, sino de nuevo, que este no debería venir condicionado por la necesidad de utilizarlo para otro fin.

Despliegue de aplicaciones web

Son dos tareas y funciones totalmente independientes la configuración de un servidor web o un servidor de aplicaciones y el despliegue de una aplicación web.

En entornos de IaaS es fácil configurar y distribuir entre los alumnos servidores de aplicaciones con todas los paquetes, bibliotecas, gemas o dependencias adecuadamente instaladas, tal como estarían en un entorno real y que la tarea del alumno se centre exclusivamente en el despliegue de su aplicación web, no en la configuración del servidor que hay debajo.

Conclusiones

Esto no son más que algunos ejemplos suficientemente diversos para ver las enormes posibilidades que se abren. En general, pueden plantearse prácticas más complejas, inviables en el esquema tradicional de uso de máquinas virtuales por la complejidad de configurar el escenario inicial y por los problemas que acarrea una equivocación del alumno durante el desarrollo de la práctica. Además las prácticas no interfieren con otras asignaturas, parar la práctica y continuar otro día es tan simple como suspender la instancia y reanudarla cuando se precise.